Muchas actividades a las que estábamos acostumbrados y que dábamos por sentadas se vieron comprometidas, tales como ir a la escuela. De un momento a otro, los centros educativos tuvieron que suspender sus actividades a causa de la pandemia, y, tanto alumnos como docentes, se resguardaron en sus casas. Como todos los demás, el equipo del Instituto DIA tuvo que interrumpir sus actividades presenciales y explorar opciones para continuar su labor con los jóvenes que cursan el Programa Promotores Culturales.
Muy pronto, el internet y las tecnologías de la información surgieron como una alternativa eficaz para darle continuidad a los contenidos curriculares; sin embargo, estas herramientas no están disponibles en todos lados y su uso depende de si las personas disponen de un equipo de cómputo y una conexión a internet.
En Yucatán, por ejemplo, hay dificultades significativas en el rubro de las telecomunicaciones y la llamada brecha digital es una realidad que pesa en la península. En muchas comunidades enclavadas en el interior del estado no hay conectividad. Hay lugares en que este servicio sí existe, pero no todos pueden acceder a él porque contratarlo implica un gasto y no siempre se cuenta con una computadora o celular.
En algunas comunidades, los jóvenes compran fichas en los negocios que tienen este servicio y así se conectan por un tiempo limitado, pero esto es un obstáculo notable cuando se trata de darles un uso pedagógico a estas tecnologías. El reto es significativo y el Instituto DIA se ha dado a la tarea de buscar soluciones para solventar estas deficiencias. De esta manera, el equipo encontró en Endless OS una alternativa para enfrentar estas problemáticas y continuar con la formación de sus promotores culturales.
¿Qué es Endless OS?
Endless OS es un sistema operativo gratuito, fácil de usar y precargado con más de cien programas que pueden utilizarse incluso cuando no hay conexión a internet. Entre las aplicaciones que tiene, están un procesador de textos, una herramienta para aprender a programar, un juego de matemáticas para niños, un editor de video, un reproductor de música, un catálogo de fotos, un editor de presentaciones, hojas de cálculo, una enciclopedia offline con más 80 mil artículos, entre muchas más. Endless OS es amigable con el usuario y funciona de manera similar a un smartphone, esto con la finalidad de que el usuario pueda manejarlo, aunque no tenga muchos conocimientos en computación. En conjunto, todas estas características convierten a Endless OS en una herramienta útil para llevar la tecnología a quienes tienen dificultades para acceder a ella.
Susana Cavazos, coordinadora de Iniciativa Baktún, nos explica que otra de las ventajas de Endless OS es que “funciona en cualquier computadora y tiene unos requerimientos de capacidad y de operación mínimos; no tienes que tener una computadora de alta tecnología para utilizarlo, y, sobre todo, funciona con internet o sin él”.
Es por ello que el equipo del Instituto DIA ve en Endless OS una herramienta que “nos puede ayudar a continuar con la formación de nuestros promotores culturales, porque es un soporte para enfrentar el reto que estamos viviendo actualmente de no poder ir a los telebachilleratos a dar las sesiones presenciales”, nos cuenta Susana.
Endless OS también tiene el potencial para que el administrador del sistema desarrolle aplicaciones y las cargue en la interfaz, de manera que es posible crear contenidos y darles el formato de una aplicación.
De camino a la comunidad
En la fase piloto de este proyecto, el equipo del Instituto DIA planea que Endless OS se use en cinco comunidades en las que está trabajando: Tekik de Regil, Xkanchakán, Izamal, Tepakán y Yaxuná. “Por eso nuestra intención con este programa piloto” –agrega Susana– “es que los jóvenes que forman parte de nuestro programa de Promotores Culturales puedan continuar su formación”. Esta aplicación se va a llamar Escuela Comunidad.
Además de darle continuidad al Programa de Promotores Culturales, Susana nos cuenta que en Iniciativa Baktún también están planteando utilizar el sistema operativo de otras maneras:
“Otra aplicación que hemos pensado, es una que tenga que ver con documentar los oficios, los saberes y las artes que hay en las comunidades, como los huertos, la milpa. Queremos hacer una especie de repertorio de técnicas o de oficios que existen en las comunidades, que hacen los abuelitos y las abuelitas. De alguna manera, esta aplicación puede convertirse en ese espacio donde estén sistematizadas esas prácticas y quien quisiera conocerlas podría hacerlo por medio de esta aplicación”.
El deseo de todo el equipo, termina Susana, “es que los jóvenes puedan convertirse en promotores y custodios de su patrimonio cultural tangible, intangible y natural. Que los jóvenes mismos sean activadores del rescate de la sabiduría, las artes y los oficios de la cultura de sus comunidades y de sus pueblos. Queremos que las personas —los jóvenes, los adultos— se conviertan en guardianes de los saberes de su comunidad”.