Cerrar y trascender es uno de los cinco principios de la metodología dia. Es el último paso en aplicarse y, por lo tanto, el que culmina con la enseñanza en una sesión. “Concluir y aprender de nuestros procesos personales es la base del desarrollo humano. Trascender es asimilar lo que surge de nuestras experiencias para utilizarlo en nuestras vidas” señala el libro Un camino para ser y trascender (2020) sobre este principio.
En este artículo, hablamos con Gabriela Barbeytto, facilitadora del Instituto de Mediación Pedagógica DIA, para que nos compartiera sus opiniones y algunas estrategias para finalizar una clase.
“Cerrar una clase es sumamente importante porque, de esa manera, los docentes y los alumnos completan un circuito de aprendizajes. Al cerrar una clase, se pueden concluir ideas, contenidos e incluso reflexiones en torno a los temas abordados”.
Para Gabriela, la metodología dia insiste en este punto por la relevancia que tiene aplicar los nuevos conocimientos o aprendizajes en la vida diaria: “Cuando los alumnos incorporan esos saberes en los diferentes ámbitos de su vida, podemos decir que hubo una trascendencia, lo que resulta fundamental para su crecimiento y desarrollo personal”.
Cerrar es dar un sentido
El docente debe darle un sentido a lo que los participantes aprenden, llevándolos a la reflexión e integrando el aprendizaje a diversas manifestaciones de expresión creativa.
Para Gabriela, la mejor manera de cerrar una clase es a través de una actividad en la cual los participantes plasmen lo relevante o significativo de la sesión y recuperen los conocimientos que adquirieron.
El docente también puede realizar interacciones que parten de preguntas como: ¿qué descubrimos en esta sesión?, ¿qué aprendimos?, ¿qué podemos aplicar en lo cotidiano?, ¿qué relevancia tiene este aprendizaje?
Planea tu cierre
El tiempo es un ingrediente crítico en la dinámica de una clase porque es un elemento crucial en la construcción de la experiencia para mantener el nivel de atención y regular los momentos en que los participantes necesitan para pensar o realizar ciertas actividades.
Gabriela recomienda incluir el cierre en la planeación de la clase: “Cuando lo estructuras anticipadamente, tomas en cuenta todo lo necesario para llevar a cabo la última actividad, como, por ejemplo, la intención, el tiempo de realización, los materiales o recursos que se requieren, las habilidades que se van a desarrollar, entre otras cosas”.
Esto no significa que sea imposible realizar algunos ajustes durante la sesión, pues muchas veces esos cambios se realizan en función de lo que surge o se construye en la clase.
“En mi experiencia, es mejor que al momento de planear se vayan asignando tiempos a cada actividad, de esta manera se tiene claridad del tiempo”, señala Gabriela.
Ejercicios de cierre
Les presentamos algunos ejercicios de cierre para potenciar la creatividad, la expresión y sobre todo para hacer explícitos los aprendizajes obtenidos. Antes de aplicarlos, debes tener presente la intención de la clase y el contexto en el que se desenvuelven los alumnos.
Tipos de cierre | Actividades | Ejemplos |
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Expresión oral: con estos ejercicios se fomenta la escucha, la confianza y la ampliación de vocabulario, entre otras habilidades. |
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Expresión corporal: ejercicios que posibilitan la manifestación y exteriorización de emociones, sensaciones, sentimientos, ideas y conceptos al utilizar el cuerpo como una vía de expresión. |
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Expresión gráfica y plástica: con estos ejercicios, los estudiantes pueden transmitir sus ideas y sentimientos de forma libre y espontánea, al experimentar con colores, formas y texturas. |
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Expresión escrita: con estos ejercicios se enriquece el desarrollo lingüístico-comunicativo. Ayudan a estructurar las ideas y a decir algo de formas distintas. |
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Los invitamos a fomentar el diálogo con sus compañeros docentes para que intercambien estas y otras propuestas.