"Nada contribuye más a tranquilizar la mente como un firme propósito, un punto en el que el alma pueda fijar su ojo intelectual."

—MARY WOLLSTONECRAFT

En México, se calcula que 3 de cada 10 adolescentes de 15 a 18 años están fuera de la escuela. Según la Secretaría de Educación Pública, durante los años 2023 y 2024, la tasa de deserción escolar a nivel nacional fue del 3% en la educación secundaria y del 11% en la preparatoria. Así, la secundaria se presenta como una etapa crítica donde el abandono de las aulas comienza a incrementarse, especialmente en contextos de alta vulnerabilidad. Se estima que solo 4 de cada 10 adolescentes en situación de pobreza extrema continúan estudiando después de la secundaria.

Además de la pobreza, otros factores clave que contribuyen significativamente a que las y los adolescentes abandonen la escuela son las normas de género, la disciplina severa, el acoso escolar, los problemas familiares, la necesidad de trabajar, la falta de apoyo educativo y —un factor aún desatendido en muchas escuelas— el estado socioemocional de la adolescencia, el cual se ve afectado por las intensas emociones propias de su edad y los obstáculos derivados de su origen social.

Emociones cambiantes en la adolescencia

Durante el recorrido educativo de los y las jóvenes en secundaria, los conflictos y desafíos socioemocionales son constantes, explica Ana Azucena Patiño, coordinadora de Proyectos Especiales del Instituto de Mediación Pedagógica DIA (IMP DIA). Las y los estudiantes enfrentan sentimientos y emociones desconocidas, eventos importantes y decisiones que no habían experimentado antes o que comienzan a tomar más relevancia. Un compañero se siente excluido, una amiga necesita hablar de su tristeza, la familia pasa por un momento difícil, hay un conflicto con un amigo o compañera, o la preparación de un trabajo en equipo requiere expresar pensamientos y sentimientos de forma clara y respetuosa.

La adolescencia, recalca Patiño, es una etapa crucial en la que se explora la propia identidad, se procesan emociones complejas y se enfrenta un entorno social y académico cambiante. Hoy en día, también se deben afrontar retos como la violencia en diversas formas, la inseguridad, los roles de género, la salud mental, el uso de dispositivos electrónicos, las redes sociales y la realidad virtual, entre otros. Todo esto impacta directamente en el desarrollo de las y los estudiantes de secundaria, su permanencia escolar y la calidad de sus aprendizajes.

Sin embargo, la complejidad de la adolescencia no solo afecta a quienes atraviesan esta etapa, sino también a las personas adultas que conviven con adolescentes en los centros educativos. En un mundo que ha cambiado vertiginosamente en los últimos años, las brechas entre generaciones, así como entre docentes y estudiantes, parecen cada vez más complejas. "Parafraseando a Flaubert, el corazón de la juventud nos parece cada vez más misterioso", menciona Patiño.

Conexión y diálogo

Si bien la educación es una herramienta fundamental para la construcción de nuestras sociedades y futuros posibles, muchos enfoques tradicionales de enseñanza, con pocas voces en el aula, siguen presentes en escuelas de México. En contraste, es imprescindible considerar enfoques integrales que involucren no solo a las maestras y los maestros, sino también a las familias y a las y los estudiantes en la búsqueda de soluciones pedagógicas sostenibles. Además, es fundamental impulsar el diálogo y la escucha, alejados de dispositivos electrónicos y pantallas, que a menudo actúan como escudo y aislamiento para todos los integrantes de la comunidad educativa.

El aislamiento y la soledad causados por la falta de conexión relacional pueden tener efectos negativos en la salud mental y física de las y los jóvenes. También pueden generar dificultades en su desarrollo emocional y social. Esto se puede manifestar en una disminución de la empatía y la compasión, así como en la pérdida del sentido de la vida. Por eso, es crucial contar con docentes que fomenten interacciones saludables en las aulas. Además de enseñar el currículo, deben consolidar aprendizajes emocionales que favorezcan una permanencia escolar con propósito y un futuro significativo.

Permanencia escolar

La permanencia escolar es clave ante los múltiples desafíos educativos, sociales y emocionales que enfrenta la adolescencia. No solo influye en el rendimiento académico, sino también en el desarrollo integral, el bienestar y las oportunidades futuras. Concluir la educación secundaria es un logro importante. Es un eslabón en la realización de un proyecto de vida y una motivación para continuar en los siguientes niveles escolares.

"Permanecer con propósito es elegir un sentido. Significa darle rumbo a cada día y a cada decisión, con el fin de aprender, trascender, contribuir y transformar", explica María Magdalena Rodríguez, coordinadora de Diseño de Trayectos Formativos del IMP DIA. De esta forma, el propósito se convierte en una meta (como consolidar la secundaria) y el significado se encuentra en el camino recorrido, apoyado tanto en lo didáctico como en lo emocional.

Como se ha mencionado, la educación secundaria es una etapa decisiva en la que aumenta la deserción escolar. En respuesta, el Instituto DIA ha diseñado el programa Permanencia con Propósito. Su objetivo es fortalecer la permanencia escolar de las y los estudiantes de secundaria, desarrollando habilidades socioemocionales. Además, se articula con el acompañamiento a docentes y directivos para crear ambientes escolares positivos y fomentar la participación activa de las familias.

Más allá de la permanencia en la escuela, explica también Rodríguez, un programa como este prepara a las y los estudiantes para enfrentar retos futuros en su vida personal y profesional. Desarrollar habilidades socioemocionales tiene un impacto duradero en su proyecto de vida. Es una inversión en el presente y el futuro de los y las adolescentes, sus familias y la sociedad. Asimismo, ofrece un espacio de crecimiento, aprendizaje y bienestar.

Implementación del programa

Desde principios de 2025, el programa Permanencia con Propósito se implementa en la Escuela Secundaria Oficial n.º 0200 "Profesor Roberto Ruiz Llanos", ubicada en Ecatepec, Estado de México. Participan 85 docentes, quienes reciben formación y acompañamiento del equipo educativo del IMP DIA. El objetivo es crear ambientes escolares afectivos, seguros y respetuosos, utilizando estrategias pedagógicas, socioemocionales y de gestión del aula para promover un sentido de pertenencia. Además, se brindan herramientas para fortalecer el vínculo entre docentes y estudiantes.

En este programa también participan 1,307 estudiantes de los turnos matutino y vespertino de la escuela. Reciben una sesión semanal para desarrollar competencias de autoconocimiento, autocuidado, autorregulación y motivación. Las sesiones son impartidas por sus maestras y maestros, utilizando la metodología DIA (Desarrollo de la Inteligencia a través del Arte). Durante estas sesiones, abordan preguntas como: ¿De qué estoy hecho(a)? ¿Qué siento? ¿Cuáles son mis fortalezas? ¿Qué hábitos contribuyen al logro de mis sueños? ¿Qué me motiva? ¿Hacia dónde voy? ¿Para qué seguir estudiando?

En la siguiente fase del programa Permanencia con Propósito, el equipo educativo del IMP DIA guiará a las y los docentes en el diseño de sus propias sesiones, basadas en los principios pedagógicos DIA (Motivar, Orientar, Generar y Rescatar, Cerrar y trascender), el diálogo, el arte y actividades creativas. Además, se buscará involucrar a las familias en el acompañamiento socioemocional de sus hijas e hijos.

Una metodología con sentido humano

Con alrededor de 30 años de trayectoria, La Vaca Independiente ha evolucionado en un proceso continuo de creación y co-creación, con el objetivo de expandir los límites del aprendizaje a través del arte, el desarrollo humano y la naturaleza. Así nació la metodología DIA, cuyos pilares son el arte y el diálogo. En el aula o en cualquier otro contexto, esta metodología genera un ejercicio transformador vinculado con una de nuestras necesidades humanas más esenciales: la conexión. Nuestro desarrollo cognitivo, emocional y social se da a través de la interacción con otras personas y el entorno.

En 2018, estas experiencias y conocimientos acumulados dieron origen al Instituto de Mediación Pedagógica DIA, un centro de innovación educativa que, como laboratorio y comunidad de aprendizaje, busca manifestar la propuesta pedagógica DIA. Su misión es generar conocimiento sobre el potencial humano y los procesos de transformación individual y social. De esta iniciativa nacen programas como Permanencia con Propósito, que fortalecen la práctica docente y las habilidades socioemocionales de las y los estudiantes.